La terapia para adolescentes y jóvenes tiene como objetivo identificar y tratar las posibles causas que originan comportamientos y actitudes inusuales que a menudo, provocan preocupación en los padres.
Actitudes agresivas, aislamiento, bajo desempeño académico, consumo de sustancias adictivas y depresión son sólo algunos de los síntomas más frecuentes que suelen atravesar los más jóvenes y que probablemente están ligados a problemas emocionales no resueltos.
Es importante que el adolescente o joven acuda a terapia cuando los padres detecten comportamientos inusuales y que éste se niega a abordar mediante el diálogo.
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